Esta reforma es parte de la ampliación de la nueva Unidad de Intermedios del Hospital Cliníc, cuyas bases se fundamentan en las necesidades de las personas usuarias de esta área: tanto los profesionales que trabajan bajo una situación de estrés prolongada como los pacientes que atraviesan momentos delicados de su salud.

Con el objetivo de mitigar el estrés y mejorar la experiencia de quienes habitan este espacio, se ha creado una unidad donde el confort, el bienestar y la privacidad son prioritarios. Para lograrlo, se han diseñado ambientes modernos y ordenados que reducen la sobrecarga sensorial. Se han empleado colores neutros, materiales naturales y una iluminación adecuada con el propósito de generar sensaciones de calidez, serenidad y tranquilidad en cada rincón.

Con relación a la iluminación artificial colocada, la misma responde a las alteraciones que experimenta nuestro cuerpo en 24 horas, condicionado por la luz y la oscuridad. Empleando el concepto de ·ritmo circadiano· se ha optado por disponer luces suaves de tonos amarillos/ anaranjados, que imitan la luz natural al amanecer o al anochecer, para acompañar de forma natural las cuestiones biológicas que impactan directamente en el descanso del paciente/familiar, y por consiguiente en su recuperación.

Otro punto del proyecto a destacar tiene que ver con la “personalización del espacio”. Todas las habitaciones cuentan con un sector único para ser intervenido por la persona hospitalizada. De esta forma, el espacio se “abre” e invita a los usuarios a que adapten la habitación a su gusto y generen un sentido de pertenencia beneficioso para ellos.

En cuanto al mobiliario, se ha seguido la filosofía de integración que AHEAD propone para optimizar los espacios. Mediante el diseño de muebles incorporados como un elemento más de la arquitectura, se busca potenciar el uso de áreas dedicadas al almacenamiento. De esta manera, se facilita el trabajo diario y la circulación de los profesionales, a pesar de las limitaciones de espacio.