El proyecto de la reforma de la AVI, situada al pabellón 0 de la planta 4ª del Hospital Clínic, integra un cambio radical de distribución y una demanda de una alta tecnología aplicada a la arquitectura. Se crea una unidad de referencia con los últimos avances tecnológicos médicos, que se integran en los detalles y soluciones constructivas. La unidad está formada por 5 boxes, uno de los cuales es de aislados, que permite tener pacientes con enfermedades infecciosas de alto riesgo como el ébola. Los boxes están dispuestos alrededor de un control central, desde el que se tiene una visibilidad total de la unidad. En la parte posterior del control se sitúan los soportes técnicos y salas de médicos, así como un espacio de sucio y limpieza tipo transfer. Los cerramientos de los boxes son con cristales electropolaritzados, que facilita la versatilidad según el tipo de paciente y sus necesidades. También permite que los dos boxes que no tienen luz natural directa la puedan tener a través de los cristales situados en la partición con el box contiguo, que sí que tiene ventana exterior. La unidad está en permanente cambio debido a la implementación periódica de nuevas tecnologías. Las soluciones constructivas son suficientemente versátiles para poder albergar todos estos cambios sin hacer cambios de distribuciones ni acabados, ya que la unidad está en permanente funcionamiento y los cambios se hacen con pleno rendimiento de la unidad.